Cómo reinvertir en su organización después del COVID-19

Cómo reinvertir en su organización después del COVID-19

Resultados a corto y largo plazo para su organización es lo principal a tener en cuenta en el momento de reinvertir su dinero en medio de la situación global que deja la pandemia, sin dejar a un lado la incertidumbre de cómo seguirá avanzando ya que es probable que se prolongue.

¿Cómo lograrlo? Con la planificación del uso del presupuesto en áreas o actividades que beneficien a la organización y le permitan avanzar del punto de equilibrio en el que pueda encontrarse y obtener mayores ganancias, dado que muchas están cubriendo apenas sus gastos.

Cada empresa tiene unas necesidades diferentes que al suplirlas la dirige a cumplir sus objetivos establecidos, sin embargo, el proceso de reinversión no debe darse solo en la estructura de la organización, sino también en su recurso humano teniendo siempre presente hacia dónde quiere ir la empresa y el objetivo a cumplir.

Por esto, es importante realizar procesos de auditoría para identificar los puntos fuertes a mantener y potenciar, y los débiles para decidir y actuar, implementando proyectos de mejora. Algunas áreas han sido más afectadas que otras en medio de la aparición del COVID-19, estas son algunas a considerar:


►  La ciberseguridad. Los ataques cibernéticos han aumentado exponencialmente poniendo en riesgo grandes cantidades de información y datos delicados que dependiendo del sector en el que se encuentra la organización, si llegan a filtrarse pueden provocar daños que van a repercutir en la confianza de inversores, proveedores, clientes y público interesado en involucrarse en su negocio. Realizar un análisis del entorno digital en el que está inmersa la empresa es muy importante para determinar las vulnerabilidades de la red en las que se necesitan implementar medidas de protección evitando riesgos innecesarios.

►  Fortalecer las capacidades tecnológicas. La constante actualización de la red y los diferentes dispositivos electrónicos tanto fijos como portátiles, nos han permitido mantener la comunicación para continuar con el ritmo de trabajo que es demandado, sin embargo, es necesario encontrar nuevas herramientas o perfeccionar las que ya se tienen para anticipar las trabas o dificultades que se lleguen a presentar por el continuo avance de la pandemia. De igual manera, es indispensable capacitar a los trabajadores para mejorar sus aptitudes digitales, en caso de que exista poco conocimiento de las plataformas de comunicación, no solo para el trabajo, sino para mejorar las relaciones interpersonales que desarrollarán igualmente una mejor cultura corporativa aunque sea a distancia.

►  Mejorar la infraestructura interna. Es necesario administrar cada uno de los procesos de una compañía para la optimización de su desarrollo y resultados en tiempo y calidad. Para eso existen los sistemas de planificación de recursos empresariales, son diseños de software que facilita la información sobre funciones de logística, manufactura, recursos humanos, y finanzas de una empresa, también teniendo en cuenta aspectos como la cultura organizacional y la alta gerencia.

Implementar estos programas informáticos integrados pueden ayudar a que su organización sea más rentable, eficaz y eficiente, puesto que la automatización de algunas actividades hará el camino más corto para cumplir las funciones de cada área, y en consecuencia el objetivo principal.

►  Designar dinero para iniciativas específicas. La junta directiva debe tener en cuenta la posibilidad de invertir en instituciones financieras, creando una política interna en la que se especifique a dónde será destinado cada monto, el por qué y para qué. Siempre teniendo en cuenta la misión de la organización, para que esto contribuya siempre a lo que quiere lograr la compañía.

►  Invertir en capital humano. La pandemia fue un momento difícil para las empresas y en consecuencia lo fue también para sus empleados debido al ajuste en la gestión del dinero, reduciendo costos y ahorrando para imprevistos. Invertir dinero para contrarrestar las carencias que pudo dejar esta coyuntura, es una excelente oportunidad para retomar las actividades de educación continua, las cuales influyen en que los trabajadores se sientan valorados como personas y sus aptitudes, mejorando la relación entre los líderes y el personal a cargo. Al dar la importancia que merece la fuerza laboral de su compañía, esta contribuirá a un excelente rendimiento de labores.


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