Resistir para sobrevivir

Si bien es cierto que las empresas en nuestro país afrontan la mayor crisis que nunca esperaron sortear por la detención de sus procesos productivos y la llegada a la temible iliquidez, el sector bancario panameño no se queda atrás, porque tan sólo en un año, a partir del comienzo de la pandemia, ha visto cómo sus utilidades disminuyeron en un alarmante 42%.

Pese a esta cifra preocupante, nuestro sistema bancario se mantiene en pie, todo gracias a las regulaciones de la Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP).

En este marco, y de acuerdo con el Informe de Actividad Bancaria, reportada al mes de noviembre de 2020, la liquidez legal de los bancos era del 64% y la adecuación del capital sobre activos ponderados por riesgo era de 16.25% lo que supera de manera importante el mínimo regulatorio de 8% que requiere la Ley Bancaria.

Ahora, matizando con la robustez de nuestro sistema bancario y el crecimiento de los depósitos que desde el inicio de la emergencia económica, han ascendido en 12,09%, lo cierto es que las utilidades disminuyeron, principalmente por la reducción de otorgamientos de nuevos créditos y por las provisiones de riesgo de los mismos, que han tenido que establecer de casi un 100% más con relación al período anterior.

Todo esto puede resumirse en un exceso de liquidez bancaria frente a la poca inversión que se hace al no haber garantías para el pago de las obligaciones. No obstante lo anterior, la SBP publicó hace tan sólo un mes, el número de clientes que han solicitado préstamos comerciales y entre los cuales destacan las empresas de construcción, con 3.199 de ellos.

Con respecto a otros sectores, revela la publicación de la Superintendencia, que, 6.593 clientes relacionados con el comercio han solicitado préstamos, y también lo han hecho 2.766 del sector agropecuario, 11.441 del sector de servicios, 372 del sector hotelero, y 3.180 de otros ámbitos como la industria, el sector financiero, las ventas y alquiler inmobiliario, las ventas al detal y la Zona Libre de Colón.

El esfuerzo es evidente porque todos necesitan activar gradualmente los contratos suspendidos y generar nuevos empleos para garantizar el crecimiento nacional.

Con esto, se demuestra que la consigna de resistir y avanzar, hace parte de la valentía de las empresas panameñas, y este estoicismo nos llena de orgullo en BDO, es por eso que también seguimos en pie para apoyarlas en sus procesos de auditoría, impuestos, finanzas corporativas y servicios legales entre muchos otros que ponemos a su disposición, respaldados en nuestra larga experiencia.

Además puede descargar el informe completo realizado por nuestros expertos frente a este panorama ‘Afectación por el COVID-19 en liquidez y desempeño financiero del mercado’.

 


Resistamos juntos, con seguridad las próximas generaciones lo agradecerán.